Tras la muerte a tiros de John Percival Matos, el 28 de diciembre de 2016, siguió la detención de la supuesta estructura que permitió al exmilitar y a su secuaz Brayan Paulino realizar asaltos en sucursales bancarias dentro de centros comerciales en 2016. Enero había sido dominado por el tema de Percival Matos y su infausta reputación.
No fue hasta la convocatoria de la Marcha contra el Fin de la Impunidad, la que se concretó el 22 de enero de 2017 con una masiva asistencia, cuando se conoció otro tema dominante.
La Marcha contra el Fin de la Impunidad fue una reacción de diversos sectores de la sociedad ante la percibida pasividad del Gobierno y la Procuraduría General de la República en la investigación del caso Odebrecht por sobornos valorados en la República Dominicana por 92 millones de dólares.
La marcha se inició en la avenida Máximo Gómez con John F. Kennedy, concluyó en el Centro de los Héroes. Diario Libre cubrió el evento Minuto a Minuto con transmisiones en vivo a través de su canal de Facebook.
El éxito de la Marcha Verde tuvo mucho que ver con el crisol de participantes y la usualmente callada clase media.
Actores del Gobierno dominicano, como el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, concedieron lo justo de la demanda.
La Procuraduría General se enfocaba en concretar un acuerdo con Odebrecht que le permitiera seguir operando en la República Dominicana y terminar la más costosa de las obras de infraestructura del Gobierno de Danilo Medina, Punta Catalina.
El acuerdo entre el Gobierno y Odebrecht incluyó el compromiso del pago de una multa de 184 millones de dólares a la empresa brasileña y la promesa de entregar información supuestamente invaluable para llevar a cabo una persecución exitosa contra los encartados en el caso en el país, mientras que Odebrecht quedó libre de ser perseguida penalmente.
Otro tema de corrupción surgía través de un incidente que dejó en shock a la sociedad dominicana. La muerte del locutor, Luis Manuel Medina, y el director, Leo Martínez, de la emisora 103 FM en San Pedro de Macorís mientras transmitían en vivo. Horas después el suicidio del homicida de los comunicadores, José Rodríguez, se supo que la causa del homicidio fue que ambos buscaban una solución a un fraude contra el homicida por parte del Consejo Estatal del Azúcar (CEA).
Tras el escándalo del CEA el Gobierno suspendió y eventualmente destituyó a su director José Joaquín Domínguez Peña, en sustitución fue nombrado Pedro César Mota
Además una querella por estafa fue interpuesta en contra de Domínguez Peña, esta vez se le acusó de vender dos veces unos terrenos, ubicados en el kilómetro 23 de la autopista Duarte que presuntamente no eran propiedad del Estado. La instancia fue elevada por ante el departamento de Sistema de Atención de la Fiscalía del Distrito Nacional, por Wilson Ramón Rosario Jiménez, a través de sus abogados José Enrique Alevante Taveras y Bella Yelissa Brea de León.
En marzo también murió Delcy Miguelina Yapor, una mujer cristiana que trabajaba transportando niños desde sus casas a centros escolares. Fue víctima de un confuso incidente en el que el hombre que perseguía a unos asaltantes le mató por error.
La familia Acosta Yapor subsanó el profundo dolor que embargó a la sociedad con una carta muy significativa.
En abril murió una de las personas más odiadas de Santiago. Adriano Román, tristemente célebre por atentar contra su exesposa y el abogado Jordi Veras.
Román murió en el hospital Cabral y Báez. Cumplía condena de 20 años en la cárcel Rafey-Hombres,
Diario Libre dio a conocer la numerosa escolta del entonces exjefe de la Policía. 132 hombres para él y sus familiares, mientras el mismo mayor general Nelson Peguero Paredes, declaraba que no sabía dónde estaban los agentes policiales que deberían preservar la seguridad de los ciudadanos.
En mayo la Procuraduría General anunció el proceso de detención de 14 encartados en el caso Odebrecht. El empresario Ángel Rondón, el exministro de Obras Públicas y Comunicaciones, Víctor Díaz Rúa; el entonces ministro de Industria y Comercio, Juan Temístocles Montás; el presidente en funciones del PRM, Andrés Bautista; el exdiputado del PRD, Ruddy González.
También los exadministradores de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas y Estatales, Radhamés Segura y César Sánchez; el abogado Conrado Pittaluga, a los técnicos Máximo D’Oleo; Roberto Rodríguez; Bernardo Castellanos y los legisladores, Alfredo Pacheco, Tommy Galán y Julio César Valentín.
En mayo se definió medida de coerción contra 10 de ellos, con excepción de los legisladores Valentín, Galán, Pacheco y el técnico Castellanos que se encontraba en Guatemala.
A la vez surgió el caso de Diandino Peña, director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), quien fue destituido tras darse a conocer el manejo de cuentas offshore de las que no dio conocimiento en sus declaraciones juradas.
A pesar de la destitución, no se ha procedido penalmente contra Peña.
Continuaron las causas de los encartados del caso Odebrecht ante la Suprema Corte de Justicia.
En junio se dio a conocer una reunión entre el presidente de la República, Danilo Medina; el presidente del PLD, Leonel Fernández, y el secretario general de ese partido, Reinaldo Pared Pérez.
Pared Pérez dijo que nadie sabía de la reunión, pero se realizó una semana después de los sometimientos y una semana antes de la convocatoria a una reunión del Comité Político.
El 11 el empresario del transporte de carga y presidente de la Federación Nacional de Transporte Dominicano (Fenatrado) es condenado a 30 años de prisión por el homicidio del exrector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Mateo Aquino Febrillet.
A la semana de la condena de Peralta, surge desde prisión un video en el que el transportista declara que cuando salga de prisión “pescará hombres y mujeres para el redil de Jehová”.
Semanas antes de la sentencia, Peralta cambió su defensa de negar haber matado a Aquino Febrillet, a decir que no puede negar que disparara contra la yipeta en la que viajaba el exrector.
La desaparición y muerte de Emely Peguero, una joven embarazada de San Francisco de Macorís, concentra la atención de los usuarios de las redes sociales. Peguero, quien se había reunido con su entonces novio Marlon Martínez antes de su desaparición es dada por desaparecida por cinco días hasta que la Policía y la Procuraduría logran avances en las investigaciones que permiten detener tanto al novio como a la madre de este este, Marlin.
Antes de la detención Marlin y Marlon grabaron un video en el que aseguraban no tener nada que ver con la muerte de la menor y rogaban a quien tuviera conocimiento de Emely que informara a sus familiares y a las autoridades.
Las semanas sucesivas a la muerte de Emely ocurrieron otros casos igualmente graves en los que mujeres jóvenes fueron asesinadas por sus supuestas parejas y exparejas.
Los huracanes Irma y María azotaron la cuenca del Caribe. Dejando graves destrozos en las Antillas Menores y destruyendo gran parte de la infraestructura de servicios de Puerto Rico.
La República Dominicana salió relativamente ilesa de ambos fenómenos. Se reportaron inundaciones en gran parte del Cibao y el Este, y algunas zonas con casas devastadas y vías afectadas. Sin embargo, la zona turística de ambas reuniones no tuvo mayores percances a pesar del temido pronóstico.
En un año con abundantes casos de corrupción matan al abogado Yuniol Ramírez, quien se había dado a conocer por denunciar irregularidades en la administración pública.
Su muerte, a manos de empleados de la OMSA ocurrió porque Ramírez estaba extorsionando al director de la OMSA, Manuel Antonio Rivas Medina, con cuatro millones de pesos, de los cuales se le entregó un millón en efectivo.
El homicidio se encuentra en los tribunales.
Como ningún otro noviembre, el Día de la No Violencia contra la Mujer tomó mayor fuerza ante un percibido aumento de los casos de Femenicidio. Las muertes de Emely Peguero, Dioskairy Gómez Ovalle, de 17 años, con parte del rostro quemado; Kimberly Adón, de 16 años, cuyos padres acusan a dos hombres de causarle la muerte; la joven Ana Mariel Tejada Reynoso, entre otros ocuparon la atención de los ciudadanos.
Una nota que cae en lo jocoso, pero revela mucho de la sociedad actual ha dominado diciembre. Es el de Glyn Thomas Bailey y Wilfa Soto, el primero un británico desempleado y sin casa, ella, una dominicana de Sánchez Ramírez.
Ambos se han hecho viral luego de que Wilfa grabara un video que difundió a través de las redes sociales pidiendo ayuda para enviar devuelta a Glyn al Reino Unido, luego de que este hombre que conoció por las redes no resultó ser lo que ella pensaba.
Según la madre de Glyn, Wendy Fitzpatrick, su único hijo tiene problemas para conservar los empleos y para sostener relaciones duraderas. Reveló que Glyn tiene un hijo de 14 años, al que nunca ve.
Asimismo explicó que Glyn Thomas Bailey, al abandonar su hogar, perdió el derecho a la vivienda del concejo municipal, por lo que a su regreso no tendrá casa donde vivir. “Mientras que no venga la mía, no me importa”, acotó