Se trata de un prototipo por el momento, pero tenemos que reconocer que la idea nos encanta. Se trata, como ves, de un mouse de corcho que cuenta con “elementos piezoeléctricos de forma que genera energía cada vez que lo mueves por la mesa o haces clic”.
Por si esta filosofía ‘verde’ no fuera suficiente para ti, está fabricado con componentes reciclables y la sensación de tener el tapón de una botella en la mano tiene que ser impagable. A ver si se materializa en un producto real.
Fuente: engadget