Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) son de cardinal importancia por lo que se refiere a la reducción de las emisiones de gases con efecto invernadero así como para ayudar a todos los países a adaptarse al cambio climático y hacer frente a sus efectos, que en ocasiones son catastróficos.
Éste es el mensaje de un Informe divulgado por la UIT y la Iniciativa Mundial sobre Sostenibilidad de las TIC (GeSI) en el contexto de la utilización de las TIC para afrontar los efectos del cambio climático.
En el Informe se describe, con ejemplos concretos, cómo las TIC pueden alcanzar esos objetivos, principalmente de las tres formas siguientes:
* mediante la reducción de las emisiones en el propio sector de las TIC
* mediante la reducción de las emisiones y aumentando la eficacia en cuanto al consumo de energía en otros sectores
* mediante la utilización de sistemas basados en las TIC para supervisar las condiciones meteorológicas y el medio ambiente en todo el mundo, así como gracias a la rápida transmisión de datos, análisis y alertas.
De conformidad con el Informe, se está haciendo frente al impacto ambiental de las TIC a través de la introducción de equipos y redes más eficientes, junto con una mejor gestión de los desechos a lo largo de todo el ciclo de vida útil de los dispositivos electrónicos.
En el mismo se indica que el ahorro de un watt de energía por parte de mil millones de usuarios de equipos TIC haría que ya no se necesitase una central de energía.
Y todos los sectores de la economía podrían reducir apreciablemente sus necesidades energéticas (y por ende sus emisiones) gracias a las TIC, las cuales permiten por ejemplo aumentar al máximo la eficiencia de los sistemas eléctricos gracias a las rejillas “inteligentes”, que distribuyen la electricidad con mucho menos derroche y son capaces de aprovechar eficazmente la energía de los recursos renovables.
En el Informe se hace hincapié asimismo en la importancia fundamental de las TIC para supervisar las condiciones meteorológicas y el clima de la Tierra, así como alertar sobre catástrofes naturales inminentes.
Cada año se salvan miles de vidas merced a los sistemas de control que utilizan datos procedentes de satélites y sensores en mar y tierra. Para garantizar que estas operaciones se efectúan sin interferencia, la UIT, en su calidad de gerente internacional de los limitados recursos de espectro de frecuencias radioeléctricas, atribuye las frecuencias necesarias y aprueba las normas técnicas pertinentes.